La madre de Orlando Sánchez, asesinado de un disparo por un antiguo sereno en las fiestas, recuerda a su hijo a los 35 años de su muerte

- "Orlando era un joven del barrio sin ningún tipo de antecedentes y había estudiado en el colegio Atenas y en el Instituto Blas de Otero. La AVA siempre recuerda a este joven y a su familia".

"35 años de la muerte de Orlando, el 4 de junio en las Fiestas de Aluche. Lo mató un vigilante municipal; eran los serenos de antes, y les dieron armas sin ninguna preparación, y lo mató por ser joven. No te olvidamos".

Elvira González, vecina de la calle Tembleque y madre de Orlando

La madre de Orlando Sánchez se ha dirigido a Guía de Aluche - LATINA para entregarnos un breve texto, escrito a mano en medio folio. Quiere que la gente recuerde a su hijo asesinado a los 19 años de edad por un antiguo sereno en las escaleras del Centro Cultural Fernando de los Ríos, el 4 de junio de 1988.

"Mi hijo no iba a robar como dijeron. Al que lo mató le procesaron, pero con recursos judiciales se alargó el caso en los tribunales y, cuando le fueron a juzgar, el autor de su muerte ya había fallecido", comenta Elvira. "Hubo movilizaciones vecinales y concentraciones de la AVA en protesta por la muerte de mi hijo".

Indica que los amigos de Orlando le dedicaron un árbol de recuerdo, colocaron imágenes suyas, pero que todo esto fue arrancado o borrado. Ella solo quiere que, a los 35 años del asesinato de su hijo, el barrio de Aluche lo recuerde.

Así recuerda la AVA al joven:

"LA MUERTE DE ORLANDO

Las fiestas de Aluche de 1988 serán tristemente recordadas por la muerte del joven de 19 años Orlando Gabriel Sánchez. Su amigo Juan Manuel Muñoz y él salieron del recinto de las fiestas y estuvieron sentados en las escaleras del Centro Cultural Fernando de los Ríos, donde un auxiliar de policía que vigilaba el centro, creyendo que los jóvenes querían entrar, se puso muy nervioso, disparó el arma y mató a Orlando de un disparo en el pecho.

El vigilante que lo mató era uno de los antiguos serenos que había en Madrid incorporado posteriormente a la Policía Municipal , por lo que no reunía las condiciones para ejercer esa labor. El Ayuntamiento en lugar de ayudar a que se juzgara al policía, lo premió, lo que originó una gran movilización en todo el barrio ante la indignación de que se premiara a alguien que había matado a un joven indefenso. Tres años después, el vigilante era procesado por imprudencia temeraria con resultado de muerte.

Orlando era un joven del barrio sin ningún tipo de antecedentes y había estudiado en el colegio Atenas y en el Instituto Blas de Otero. La Asociación siempre recuerda a este joven y a su familia".