El pasado 17 de marzo un grupo de internos se encaramó a la azotea del CIE para reclamar su liberación al temer que podrían infectarse por el Covid-19 y ante la imposibilidad de ser expulsados de España tras el cierre de fronteras.
A los internos se les ha ofrecido acudir a ong's y a pisos de amigos o familiares donde permanecerán localizados para su expatriación cuando acabe la situación de confinamiento ciudadano ya que actualmente están suspendidos los vuelos internacionales.
Según fuentes policiales, esta decisión ha sido tomada por la Dirección Adjunta Operativa de la Policía Nacional, después de que se hayan suspendido todos los vuelos de repatriación, se hayan aplazado todos los plazos administrativos (también los de expulsión) y no se conozca todavía cuándo terminará la crisis sanitaria ni el estado de alarma.
Hace dos semanas el Defensor del Pueblo pidió la liberación de estas personas porque se encuentran "en una situación particularmente vulnerable" en el escenario de la crisis sanitaria actual, que además "impide" que se pueda materializar la devolución o expulsión a su país de origen.
El director adjunto operativo de la Policía Nacional, José Ángel González, aseguró que toda persona interna en un CIE será puesta en libertad si durante la crisis del nuevo coronavirus y el obligatorio confinamiento que conlleva, supera el máximo de estancia legal en estos centros, fijado por ley en 60 días.
Dejan en libertad a casi todos los internos del CIE de Aluche https://t.co/oSwGfalSat
— Julio de la Fuente (@juliodirecto) April 2, 2020
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